Michka Seld ha vivido siempre sola, ya mayor y aquejada de afasia es internada en un asilo de ancianos. Allí el logopeda, Jerôme, le ayuda con su problema de lenguaje y se sincera él mismo con su situación personal con su padre. Marie, una joven vecina a la que Michka cuidó de pequeña también acude a visitarla y a agradecer todo lo que hizo por ella. Michka sufre de soledad y desea ponerse en contacto con una matrimonio que le salvó la vida durante la guerra.Dos temas son fundamentales aquí: la vejez, la enfermedad y el fin de la vida por un lado y, por otro, el hecho cada vez más infrecuente de dar las gracias. Algunas críticas francesas han sido demoledoras con este libro, juzgándolo demasiado buenista y simplón. Es sencillo, es fácil pero hace pensar sobre estos dos asuntos sobre los que no nos detenemos demasiado ¿Por qué no leerlo?
A mí me gustó mucho y me hizo pensar sobre esos dos temas que en realidad no se abordan mucho ni en la vida diaria ni en la literatura. La vejez es un tema tabú incluso hoy, cuando la longevidad, por lo menos en Occidente, plantea incluso problemas sociales. El agradecimiento tampoco es algo que hoy en día se valore: lo queremos todo lo más rápidamente posible y encima creemos que lo merecemos todo y despreciamos algo tan básico para vivir en sociedad como es ser agradecidos. Hace tiempo, en una entrevista, la autora dijo que quería escribir sobre conceptos que nos vinculaban a los demás; esos conceptos hemos visto que son la lealtad y el agradecimiento. Estos dos conceptos hoy en día, en la sociedad en la que vivimos, parecen anacronías y sin embargo son básicas en las relaciones humanas. Yo también he leído críticas demoledoras de este libro, pero a mí me gustó la sensibilidad y la delicadeza con la que Delphine de Vigan trató esos temas. Supongo que no soy objetiva porque me gusta mucho la autora, pero supongo también que la literatura es eso, perspectivas personales.
Gracias por tus comentarios tan acertados. El agradecimiento es algo que sorprende en la sociedad. En mi trabajo hoy me he dedicado a agradecer con unos bombones a los empleados que nos han ayudado en un evento, la gente no sabe cómo reaccionar de la sorpresa que le causa. El siguiente libro trata sobre las redes sociales.. ya en francés, supongo que en breve Anagrama lo traducirá.
Sí, Les enfants sont rois. Ya lo he leído; la he leído siempre en francés. Supongo que no tardarán en publicarlo en español.
Y sí, tienes razón, no sabemos reaccionar ante el agradecimiento. Es curioso.
Me alegra que puedas leer en francés…moi aussi