Minsk, Bielorrusia, primeros años años del s.XXI. Un hombre joven se instala en un apartamento. Su vecina de más de noventa años, Tatiana Alekséievna, se presenta e insiste encontrar su vida, antes de perder la memoria. Alexander, que así se llama el hombre, acaba de vivir un improbable drama y le escucha con paciencia. Nacida en Londres, políglota e hija de un convencido comunista, Tatiana trabajó en Ministerio del Interior ruso durante la SGM como mecanógrafa. Allí conocía todos los secretos del régimen: las listas de prisioneros o la persistente insistencia de los comunistas en ignorar los requerimientos de la Cruz Roja respecto a los prisioneros de guerra. Tras la guerra, padece el régimen estalinista, el gulag y la búsqueda de sus seres queridos por la extensa URSS. Libro tremendo, dramático, histórico, e incluso, un poco místico pero que es de lectura ágil y se agradece que no se detenga en todo lo morboso.