Tras este sugestivo de título que evoca una novela romántica, de intriga o incluso una de terror se esconde un libro de autoayuda (clasificación de la biblioteca) en la que el tema es saber escuchar. El subtítulo lo indica claramente: una historia sobre el poder de la escucha. Tras varias anécdotas sobre su vida personal y profesional, el autor, a mitad de la obra, nos señala varios paso para saber escuchar a la gente que tenemos alrededor. Pienso que la lectura adquiere más ritmo cuanto narra anécdotas sobre su vida profesional, me habría gustado saber más , pero me quedo con la importancia de saber escuchar. Aquí no me queda del todo claro si es con finalidad venal o altruista, pero lo cierto es que es una virtud (o competencia, que dicen ahora los pedagogos modernos) que se debe practicar. La idea fundamental que subrayaría es esta: cuando alguien cuenta algo, no se debe pasar directamente al egocentrismo de yo, a mí me ha pasado… si no callar, asentir si seguir escuchando. Y es que necesitamos ser escuchados y que nos escuchen. Aquí va lo que me pasó hace poco. Tras unas vacaciones saludé con un abrazo a una compañera llorosa por un drama personal. Otra compañera observó la escena y me preguntó que qué le pasaba, se lo conté y me replicó asombrada que yo me enteraba de todo. No es que sea cotilla, es que me senté a su lado en el autobús, le pregunté ¿qué tal? …y media hora después ya estaba al tanto del asunto. Si una lectura puede hacer que escuchemos a los demás, bienvenida sea.
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LA MANSIÓN DE LOS CHOCOLATES, María Nikolai (Maeva)
Judith es una joven perteneciente a la burguesía de Stuttgart a principios del s.XX. Su padre posee, como indica explícitamente el título, una fábrica de chocolate y a ella le apasiona el producto así que dedica sus días a trabajar en la tienda y a crear productos innovadores. Su madre se encuentra en un sanatorio y sus dos hermanos gemelos se dedican a realizar toda travesura que se les pasa por la cabeza. El señor Rothmann, padre de Judith, decide concertar el matrimonio de su hija con el pusilánime hijo de un banquero para salvar su negocio de la quiebra. Por supuesto que a Judith esto le parece muy mal porque su corazón se inclina hacia Víctor, un joven mecánico que ha llegado desde Berlín con un pasado no muy claro. Muchos personajes que afortunadamente se identifican muy bien, varias tramas de amor, de lucha social, de negocios y de espionaje que se siguen con un relativo interés (porque todo sale bien). Adjudicamos a esta lectura el calificativo de la “novela tonta” del confinamiento, como una película de sobremesa.
TODOS LOS DÍAS SON NUESTROS, Catalina Aguilar Mastretta
¿Qué hacía este libro en mi lista? lo ignoro y la verdad es que me arrepiento de haberlo cogido de las baldas de la siempre bien surtida biblioteca. Una chica, Mari, cuenta como se desenamora de Emi, su chico, tras narrar con todo tipo de detalles de cómo se enamoró de él, cómo se conocieron el colegio y se reencontraron en la universidad. Luego vienen las lágrimas post ruptura y las locuras para olvidarle. El único mérito que le encuentro es que se lee (y se olvida) fácil salvo, claro está, los mexicanismos que tampoco me han impedido mucho la comprensión del texto, por lo demás previsible, repleto de treintañeras en crisis de pareja que corren de un lado a otro con uno y con otro ahogando sus penas en alcohol y otros amoríos. A lo mejor una revista de peluquería puede mejorar esta lectura por la calidad de sus fotos.
LA TRIUNFANTE, Teresa Cremisi (Anagrama)
La editora Teresa Cremisi narra aquí a modo de novela su vida. Desde su infancia exótica y acomodada en Alejandría (Egipto), hasta su jubilación dorada en un pueblo de la costa Amalfitana. A partir de ahí una búsqueda de la identidad y el saberse mimetizar con el ambiente: primero en un colegio de niñas bien en Milán, luego en un periódico de izquierdas a finales de los sesenta y como ejecutiva en diversos puestos de responsabilidad en importantes empresas en Francia. Para cada etapa de su vida hay un libro de referencia (Conrad, Stendhal…) cuyas citas resultan inspiradoras a la par que proféticas. Bastante curiosa es también la relación con las diferentes lenguas con las que debe vivir y trabajar. Resulta sencillo de leer pero un tanto deslavazado para unas vivencias tan interesantes. Un tanto decepcionante por lo que pudo haber sido y no fue.
SIN UNA PALABRA, Linwood Barclay (Debolsillo)
Cynthia se despierta una mañana resacosa de su noche anterior. Ha tenido una fuerte discusión con sus padres porque su progenitor la ha encontrado en compañía del poco recomendable Vince Fleming y además, borracha. La joven no encuentra ni a sus padres ni a su hermano Todd cuando se despierta. Por inexplicable que parezca han desaparecido. Su tía Tess, hermana de su madre, la acoge y Cynthia consigue terminar sus estudios universitarios, casarse con Terry Archer y tener una hija, Grace. Veinticinco años después del drama y gracias a un programa de televisión el caso se reabre, las pistas empiezan a surgir por doquier y al final el misterio se resuelve con bastantes dosis de acción y de intriga. La categorizaría directamente en «lecturas de piscina» y la recomendaría vivamente a los que me piden «de estos libros que enganchan» porque es verdad que despierta el interés por saber qué ha pasado y qué ocurrirá luego, además tampoco exige un gran esfuerzo intelectual, así que para entretenerse y pasar el rato es perfectamente correcta.
LA PUERTA DEL CIELO, Reyes Calderón (Planeta)
Un profesor de literatura de instituto gallego recibe una beca para ir a estudiar a Madrid. Por casualidad encuentra alojamiento en un ático en el barrio de Salamanca. Lo que al principio parece una bicoca por el precio y las condiciones pronto dejará de serlo ya que la casa que habita Gerardo parece poblada de fantasmas y presencias indeseables. Primero encuentra un cuaderno escrito por Ruth, una historiadora americana apenada por la repentina muerte de su padre que habla sobre la posibilidad de llegar al cielo en vida; luego las vecinas y la portera acuden a su casa sin la menor consideración y por último un encuentro que resulta providencial con el padre Koldo Otxotorena, exorcista, que le ayudará a resolver el problema y a conocer a alguien importante en su vida. La lectura es ágil, tiene todos los ingredientes y tópicos del género: un diario misterioso, demonios, presencias inquietantes, el bien, el mal, las meigas, lo paranormal y algo de amor entre tanta persecución y momentos de angustia. Personalmente el tema me atrae más bien poco, es un «sin más» y encogerse de hombros.
LA HISTORIA DE MI VIDA, Hellen Keller (Renacimiento)
Autobiografía de la escritora americana Hellen Keller (1880-1968) que comprende su infancia y su llegada a la universidad tras una continua carrera de obstáculos dada su condición de ciega y sorda. La mitad del libro es la biografía y en la otra mitad aparece una selección de sus cartas. Esta lectura se me ha quedado corta porque me hubiese gustado más una profundización en la metodología empleada por Anna Sullivan para educarla. Además, como es hija de la época, me ha resultado un pelín cursi, con tanta descripción ingenua de la naturaleza. Sin embargo, quedan dos momentos que merece la pena subrayar: el primero es una reflexión sumamente acertada sobre los sentimientos ante un examen (p. 111) cuando se te olvida la pregunta que tienes que contestar, aunque te acuerdes de todo lo demás y el segundo es la convicción de que el esfuerzo es vital para conseguir lo que se pretende.
LA MUJER DE PAPEL, Guillaume Musso (Planeta)
Tom es (era) un escritor de renombre, famoso por haber creado una trilogía que ha ayudado a miles de personas en todo el mundo. Tras un fracaso amoroso con Aurora, bella y cotizada pianista, entra en profunda depresión creativa y se deja vencer por el alcohol y las drogas. A todo ello se añade una crisis económica a la que Milo, amigo de infancia, le ha conducido tras desastrosas inversiones. Una noche uno de los personajes secundarios de su novela, Billie, aparece repentinamente y la vida de Tom da un vuelco que le obligará a recorrer medio mundo con un personaje creado por él. Pretendida meta-literatura lo que llega es a describir personajes aburridos y prototípicos, además, la acción es un batiburrillo de tópicas escenas de telefilmes de sobremesa, con road-movies y momentos románticos pastelones. Es la segunda (y última) oportunidad que le doy al autor más vendido de Francia. De vez en cuando hay que atisbar este tipo de libros para luego darse el gustazo de disfrutar con lecturas buenas de verdad.
LOS CABALLEROS LAS PREFIEREN RUBIAS PERO SE CASAN CON LAS MORENAS , Anita Loos (Alba)
Cuando uno lee este título piensa inmediatamente en Marilyn Monroe pero resulta que el libro, como suele suceder, fue antes. En este monólogo de Lorelei (la rubia) narra su vida y la de Dorothy (la morena): Resumen: dos chicas monas que consiguen casarse con millonarios a pesar de ser bastante incultas y de clase baja. Escrita en los años 20 fue publicada por entregas pero la lectura seguida me ha resultado un tanto pesada y repetitiva porque siempre se retoma el mismo tipo de chiste y el mismo esquema argumental: Dorothy y Lorelei en Londres, París o Viena, desayunando en el Ritz y haciéndose “amigas” de hombres con alto poder adquisitivo. He de reconocer que esta cháchara de verborrea incesante que me pondría sumamente nerviosa en la vida real. Sin embargo, recuerdo con cariño la película en la que al final se sabe que la actriz protagonista no es tan tonta como parece.
LA FELICIDAD ES UN TÉ CONTIGO, Mamen Sánchez (Espasa Calpe)
Historia atiborrada de personajes y de acción con un punto de caricatura. Vamos al argumento: cinco mujeres, Berta, Asunción, Gaby, María y Soleá trabajan para una revista literaria Librarte cuyo dueño, el magnate editorial Marlow Craftsman , decide cerrar por motivos económicos. Para ello envía a Madrid a su hijo Atticus con la misión de despedir a las empleadas previo pago de una indemnización. Ante la noticia las fieras españolas deciden actuar y Soleá se lleva al flemático inglés a Granada, a vivir con su familia gitana en el Sacromonte con la promesa de unos poemas perdidos de Lorca: mientras, en Madrid las cosas se complican cuando un inspector peculiar aparece preguntando por la desaparición del británico y María, la contable, confiesa un secreto que la tiene atormentada. A pesar de las abundantes tramas y subtramas, el lector no se llega a perder y la historia, a pesar de lo disparatada y prototípica que pueda parecer, se lee con una sonrisa. El único pero que le pondría, aunque la calidad literaria es «para no entrar en muchas profundidades» el exceso de escenas un poco subiditas de tono que no vienen a cuento en la narración aunque aquí hay mucho amor y mucha pasión.