Ucrania en 1984, Alexei es el director de una escuela de primaria en la ciudad de Prípiat cerca de Chernóbil. Su esposa, Helga lo abandona y él inicia una espiral de bebida (vodka, claro) y de dejadez personal. En el centro escolar sigue con sus funciones de modo automático charlando con profesores, padres y alumnos. Irina es una de las alumnas, callada y silenciosa que parece tener problemas en casa. Una noche Alexei la recoge empapada porque ha huido de su hogar. Así, la acoge en su casa y viven juntos durante un confinamiento voluntario por parte de ella de casi dos años. La convivencia es extraña, parece más bien un padre con una hija adolescente, los días se suceden rutinarios: él él acude a su trabajo y ella lo espera en casa, aburrida y deseando cumplir al mayoría de edad para poder ser libre al fin. De repente, en abril de 1986 deben evacuar la ciudad precipitadamente y lo que era una historia tranquila y morosa pero interesante se convierte en una novela de acción. Lectura peculiar, de lenguaje sencillo pero contundente de fondo. Interesante descubrimiento de este autor por cómo, con una trama tan poco convencional, seduce al lector.
TODO ESTO EXISTE, Iñigo Redondo (Random House)
Deja un comentario